Llevo un tiempo muy preocupada con el estilo de educación que quiero para mis hijos. El modelo tradicional de la educación española cada vez me parece que hace aguas por muchos lados, y no lo veo bien. Siempre he tenido en mi interior a una científica, y esa parte me está llevando a investigar nuevas maneras de educar. Aunque soy muy profana en el tema de distintos modelos de educación, cada vez me llama más la atención el Método Montessori. Repito, soy muy profana. Sin embargo, en lo que estoy leyendo de María Montessori, encuentro que realmente VE al niño y que le impulsa a lograr su potencial. Encima lo hace desde la experiencia, desde el asombro en el niño. Lo hace desde los sentidos: ver, oír, probar, tocar, oler. Muy lejos del modelo centrado exclusivamente en la inteligencia Intelectual. Llega a la inteligencia intelectual desde los sentidos, desde el movimiento, desde la experiencia.
Cada vez me fascina más lo que voy conociendo de María Montessori.
También es verdad que, conforme voy leyendo más, me doy cuenta de cómo meto la pata a veces en mi tarea de madre, de maestra de mis hijos. Sin darme cuenta, en más de una ocasión, yo les voy diciendo lo que tienen que hacer, en lugar de dejarles que se den cuenta ellos de cómo lo pueden hacer. Pero bueno, lo bueno es que voy tomando conciencia y ese es siempre el primer paso.
Hoy hace 63 años que murió Montessori, a los 82 años. Ella escribió unos “mandamientos recordatorio” para los papás y las mamás. Muy cortos, muy densos. Los he leído hoy… si los consigo poner en marcha, estoy convencida que mis hijos crecerán de forma más integra, con una personalidad bien desarrollada, nuestra relación mejorará… y en el futuro serán individuos que vivirán en armonía y con los que los demás querrán estar.
1.- Los niños aprenden de lo que los rodea.
2.- Si criticas mucho a un niño, él aprenderá a juzgar.
3.- Si elogias con regularidad al niño, él aprenderá a valorar.
4.- Si se le muestra hostilidad al niño, él aprenderá a pelear.
5.- Si se es justo con el niño, el aprenderá a ser justo.
6.- Si se ridiculiza al niño con frecuencia, él será una persona tímida.
7.- Si el niño crece sintiéndose seguro, aprenderá a confiar en los demás.
8.- Si se denigra al niño con frecuencia, se desarrollará en él un malsano sentimiento de culpa.
9.- Si las ideas del niño son aceptadas con regularidad, él aprenderá a sentirse bien consigo mismo.
10.- Si se es condescendiente con el niño, él aprenderá a ser paciente.
11.- Si se alienta al niño en lo que hace, ganará seguridad en si mismo.
12.- Si el niño vive en una atmosfera amigable y se siente necesario, aprenderá a encontrar amor en el mundo.
13.- No hables mal de tu niño, ni cuando está cerca, ni cuando no lo está.
14.- Concéntrate en el desarrollo de lo bueno del niño de tal manera que sencillamente no quede lugar para lo malo.
15.- Escucha siempre a tu hijo y respóndele cuando él se acerque a ti con una pregunta o un comentario.
16.- Respeta a tu hijo aunque haya cometido un error. Lo corregirá ahora o quizá un poco más adelante.
17.- Está dispuesto a ayudar si tu niño busca algo, pero también está dispuesto a pasar desapercibido si él mismo ya ha encontrado lo que buscaba.
18.- Ayuda al niño a asimilar lo que antes no había podido asimilar. Haz eso llenando el mundo que lo rodea de cuidado, discreción, oportuno silencio y amor.
19.- Cuando te dirijas a tu hijo, hazlo siempre de la mejor manera. Dale lo mejor que hay en ti.
Para mí todos son grandes. Si me tuviera que quedar con uno sólo sería el número 14: “Concéntrate en el desarrollo de lo bueno del niño de tal manera que sencillamente no quede lugar para lo malo”.
…Y con el número 19. Lo siento, me resulta imposible escoger sólo uno. El nº 19 también: “Cuando te dirijas a tu hijo, hazlo siempre de la mejor manera. Dale lo mejor que hay en ti”.
Y tú, ¿con cuál te quedarías?
¡Si consideras que puede servirle a alguien, compártelo!
Me quedo con el 17: Ayudar al niño si busca algo y pasar desapercibidos (y aceptar su elección) si él mismo ya ha encontrado lo que buscaba.
Además me parece importante saber aplicarlo para todas las personas y a todas las edades.
Pili C.
Me encanta. Comparto…
Pamela RY
Genial, Pilar. Estoy de acuerdo contigo en que es importante saber aplicarlo para todas las personas y a todas las edades. ¡¡Todos estos mandamientos son para aprender a aplicarlos a TODOS!!!!
¡¡¡Un beso enorme!!
Pamela, qué bueno que te haya gustado. ¡Montessori dice cosas muy buenas!
Besos
Para mis clases el 1. Sin duda.
Yo me interesé hace tiempo por este método (por el oficio)… y desde entonces me quedé con el 1 (y alguno más pero no me dejas elegir más). 😛
Fran A.
Para mi este también es un tema muy importante.
Últimamente estoy leyendo a H. Gadner y sus inteligencias múltiples y me parece una propuesta brillante.
De Montessori me gusta mucho el 18. Me parece todo un reto llenar el mundo de mi hija de cuidado, silencio, amor y añadiría la idea del respeto. A veces les pedimos un respeto que sin darnos cuenta no tenemos con ellos.
Arturo P.
El número 1 es una gran verdad, Francisco. Es más, es sorprendente que Montessori lo tuviera que poner como Mandamiento. ¡Es como decir que el circulo es redondo!
:-O
Bueno, te dejo decir otro mandamiento más que elegirías
Élida
Arturo, las inteligencias múltiples me parece tambien a mi una propuesta brillante. ¿Qué libro estas leyendo de Gadner exactamente? Ojalá y cada vez más maestros y profesores se formen y tengan en cuenta las distintas inteligencias en su clase.
Y el 18 me parece un mandamiento lleno de RESPETO al niño. ¡¡Gracias!!
Élida
"La inteligencia reformulada". Parte del concepto que tradicionalmente se ha tenido de la inteligencia, de si ésta es genética o no y de su protagonismo en el sistema educativo. A partir de ahí plantea su teoría.
Poco a poco (es un gran cambio) hay centros que van incorporando las ideas de Gadner a su planteamiento pedagógico.
Me parece muy interesante la experiencia del colegio Montserrat: http://www.cmontserrat.org
Arturo P.